martes, 2 de marzo de 2010

Torino: Un dìa con la rabia de los inmigrantes


La rabia e indignaciòn por los derechos pisoteados y contra la
explotaciòn se dejò sentir bajo la Molle Antoneliana en Torino.
Rosarno dejò escuela.



El 1 de Marzo 2010 en Italia, en el llamado por algunos "24 horas sin inmigrantes" por otros "el paro de los inmigrantes" si ha evidenciado indiscutiblemente la extraodinaria fuerza contenida de los trabajadores extranjeros.

En Torino se ha iniciado esta jornada de lucha desde tempranas horas, ya a las 6 de la mañana se encontraba "el Coordinamento Antiracista Torinese" a volantinear delante della "Questura", que es una especie de comisaria donde los inmigrantes hacen largas colas en la calle para recoger sus documentos, .

Despuès de 2 horas de frìo intenso en la "Questura" hemos visto como el mercado "Porta Palazzo", que es uno de los mercados abiertos màs grande de Europa , que es conformado en su gran mayorìa por inmigrantes, habìan adherido al paro in casi un 60/70 %. Dirìamos que es la màs grande presencia de ausentismo lavorativo, puès los principales sindicatos en Torino no han sido promotores directos por lo tanto no cubrìan la espalda a los protestantes. Solo los sindicatos de bases, que son los màs combativos, pero a su vez màs pequeños, han participado activamente.

El hecho màs participado ha sido la asamblea pùblica que se ha llevado a cabo frente a la estaciòn de "Porta Nuova" desde las 5 de la tarde, se han reunido màs de 3000 trabajadores hombres, mujeres, jòvenes inmigrantes y nativos para protestar justamente tanto contra las leyes racistas, la discriminaciòn como tambièn contra el sistema de explotaciòn.

Muy al margen de la corelaciòn de los hechos es bueno reiterar que ha sido una manifestaciòn històrica e importante para la comunidad inmigrada, pero màs importante aùn serà aquello que suceda despuès del 1 de marzo, es decir la capacidad de organizaciòn que tengan las fuerzas de izquierda, los partidos polìticos, los sindicatos, el movimiento autònomo y otras organizaciones. Allì marcarà verdaderamente el èxito de esta manifestaciòn.

Una nota importante que se ha dado ha sido la muestra de firmeza y reacciòn de los manifestantes ante la detenciòn de una muchacho africano clandestino cuando iba al plantòn y en la misma manifestaciòn se ha generado presiòn a las fuerzas policiales y judiciales hasta que ha sido liberado. Una vez màs los hechos lo demuestran sin luchas no hay victorias.

Era evidente la fuerza de la juventud, la rabia del inmigrado y la solidariedad de los trabajadores italianos. Pero màs evidente aùn ha sido la fuerte llamada de atenciòn que implica esta manifestaciòn a toda la clase polìtica tanto de derecha, centro izquierda y de la misma izquierda. Recordemos que èstas ya han dirigido polìticamente al paìs y no estado en grado de solucionar sus problemas bàsicos, todo lo contrario han agudizado la situaciòn.

Aquello que queda a los trabajadores inmigrantes e italianos es unir sus luchas, tener la conciencia que pertenecen a la misma clase y que la guerra entre pobres es una consecuencia del racismo instrumentalizado de los padrones, la guerra entre pobres no es la soluciòn si no la consecuencia de un sistema de producciòn injusto e inhumano que se llama capitalismo. Delante de esta situaciòn es necesario construir nuevos mecanismos, nuevas formas de autogestiòn, organizaciòn y participaciòn en la polìtica directa del paìs.

Torino se caracterizò en la segunda guerra mundial por ser una ciudad antifacista y antinacista, aquì estuvieron los valientes "partigianos", que eran una especie de guerrilleros que combatian al Duce Mussolini y al fiurer Hitler... Hoy en dìa la derecha que añora al facismo la quiere convertir en su sede de poder a travès de "La Lega" y el "Partido de la Libertad", justamente los 2 partidos que son los generadores de la actual ley de inmigraciòn, llamada la Bossi e Fini: que es reflejo de la voluntad de los padrones para continuar "con el sistema democràtico".

Torino se ha caracterizado hoy por expresar su fuerza antiracista, màs aùn los inmigrantes, muchos de ellos sin saber hablar correctamente el italiano han expresado muy bien su voluntad y disponibilidad de luchar por sus derechos y por la dignidad y eso es suficiente para comunicar su rabia y justificar su rebeliòn, ejemplo concreto lo fue Rosarno hace poco al sur de Italia, con la revuelta de los "negros" en la ciudad de las naranjas y de la mafia institucional.

Que este 1 de marzo sirva para dar la palabra al inmigrante, darle el protagonismo que se merecen y buscar la unidad del movimiento y de la clase para poder conseguir mejores condiciones de vida para todos los trabajadores persistiendo asì en construir una sociedad sin explotadores blancos, negros o chinos.